Uno de los aportes relevantes que la argumentación hace a la enseñanza y el aprendizaje de las ciencias, tiene que ver con la mejora de las formas como los estudiantes construyen comprensiones acerca del conocimiento científico escolar (El-Hani y Mortimer, 2007; Stipcich, et ál., 2006; Texeira, 2010), con lo cual esta habilidad de pensamiento en el campo de la enseñanza y el aprendizaje de las ciencias de la naturaleza, se ha constituido como un tema multidisciplinar abordado desde sus fundamentos por las ciencias del lenguaje (Buty y Plantin, 2008). En este artículo se entiende a la argumentación como una habilidad cognitivo-lingüística (Jorba, et ál., 2000), es decir, como una estrategia de tipo metalingüístico presente en actividades de aprendizaje que estén orientadas hacia la estructuración del conocimiento adquirido y en favor del aprendizaje significativo (Aragón, 2007).
Published the
Redes Sociales DIE-UD