Comunicado del Consejo Académico del Doctorado Interinstitucional en Educación (CADE) a la Comunidad de la Universidad Distrital Francisco José de Caldas y a la opinión pública

En relación con la continuidad del paro estudiantil de la Universidad Distrital Francisco José de Caldas durante las primeras semanas del mes de enero de 2019, y las consecuentes asambleas realizadas por la Comunidad Universitaria, disposiciones normativas emanadas por el Consejo Académico y el Consejo Superior Universitario, comunicados de los proyectos curriculares de las distintas facultades, declaraciones de algunos actores sociales de esta alma mater en medios de comunicación y la reciente toma a la sede administrativa por parte de un grupo de estudiantes, el Consejo Académico del Doctorado Interinstitucional en Educación (CADE), manifiesta:

1. Ratificamos nuestra valoración y ofrecemos nuestro apoyo al Movimiento Universitario Nacional, en particular al Movimiento Estudiantil de la Universidad Distrital Francisco José de Caldas, por los logros alcanzados en 2018, los cuales aportan significativamente a la transformación progresiva de las Instituciones de Educación Superior (IES) y al Sistema de Educación Superior en general, tanto en las reglas de juego presupuestales como en la conquista de la autonomía universitaria. Es de resaltar la labor del movimiento en lo concerniente a la organización, movilización, liderazgo y unidad alcanzados para la negociación responsable del pliego nacional y los pliegos particulares por universidad. Sin duda, las acciones desplegadas desde el inicio de las movilizaciones, además de evidenciar el fortalecimiento del Movimiento Universitario Nacional, motivaron a que otros sectores sociales, afectados por la implementación de un modelo de desarrollo ultraliberal que precariza la vida de la sociedad, reprime iniciativas progresistas, vulnera derechos fundamentales y destruye la naturaleza, se hayan articulado a la defensa de la Universidad y al fortalecimiento de otras agendas en la construcción de lo público.
2. Es responsabilidad del Movimiento Estudiantil y de las comunidades universitarias velar por el seguimiento y el control de los compromisos adquiridos, especialmente de los recursos asignados por el Estado en dos niveles. Por un lado, en lo nacional, es fundamental hacer seguimiento a los compromisos y obligaciones asumidos por el Gobierno Nacional en relación con tres aspectos definidos en la mesa de diálogo con el MEN: a) Garantizar la culminación del periodo 2018 -3 y desarrollar sin contratiempos el periodo 2019-1; b) Vigilar los recursos públicos conseguidos que llegarán a las IES, instalando mecanismos de control según los propósitos, procedimientos y cronogramas acordados; c) Velar porque los Consejos Superiores Universitarios asuman, sin conflictos de interés, la distribución y ejecución equitativa de los recursos conforme a las exigencias de ley y los planes de desarrollo universitarios. Por otro lado, en lo local, es claro que existen cuatro aspectos que deben ser atendidos con el compromiso de todas las partes en la Universidad Distrital Francisco José de Caldas: a) Garantizar que los recursos logrados sean gestionados con transparencia, empleando mecanismos de control y seguimiento, que tengan en cuenta a los estamentos de la Comunidad Universitaria; b) Trabajar por la dignificación de los profesores ocasionales, tanto de tiempo completo como de cátedra, compromiso que ha de garantizar contratos justos en condiciones adecuadas para el ejercicio docente; c) Instalar la mesa de contingencia para resolver problemas urgentes de infraestructura en varias sedes de la Universidad, especialmente la sede en la que se ubica la Facultad de Artes; d) Instalar la mesa de diálogo para la conformación de la Asamblea Universitaria, la cual, además de ser una iniciativa del proceso de Reforma Universitaria, se puede convertir en una instancia fundamental de participación para garantizar el cumplimiento de los compromisos enunciados y la construcción progresiva de la nueva Universidad Distrital Francisco José de Caldas.
3. Consideramos que, en la coyuntura, es necesario mantener abierta la Universidad y en pleno funcionamiento de sus actividades misionales. La experiencia histórica de los movimientos estudiantiles indica que los paros prolongados, luego de procesos de movilización exigentes y desgastantes, pueden traer consigo la dispersión de las comunidades y la fragmentación de los procesos organizativos. En tal sentido, coincidimos con varios actores de la Comunidad Universitaria quienes han señalado que, si tenemos la Universidad abierta y empezamos a trabajar, se mantendrá vivo el movimiento y con las condiciones ideales para adelantar los procesos asamblearios, de diálogo y de control, tal como se ha señalado.
4. Hacemos un llamado respetuoso y fraternal a los estudiantes para que faciliten el inicio de las actividades académicas y administrativas, de manera que, desde el carácter abierto y dinámico de la Universidad, fortalezcamos como comunidad los espacios de asambleas, de mesas de diálogo y demás procesos organizativos internos, así como el diálogo con la Administración de la Universidad, el Gobierno Distrital y el Gobierno Nacional en lo concerniente al seguimiento de los compromisos establecidos. Es importante considerar, tal como se ha analizado en otros momentos, los perjuicios económicos que trae esta situación de paro al Sistema Universitario en general y a las condiciones sociales y económicas de trabajadores, contratistas y profesores, quienes también se han visto afectados en su situación personal, profesional y familiar.
5. Hacemos, también, un llamado respetuoso a la administración de la Universidad, al Gobierno Universitario y al Consejo Superior Universitario para que otorguen las garantías académico –administrativas necesarias de modo que se pueda culminar el periodo académico 2018-3 y dar inicio al periodo 2019-1. Asimismo, invitamos a que instalen la mesa de contingencia con el fin de establecer medidas concertadas que hagan posible solucionar problemáticas de infraestructura como las que padecen estudiantes, profesores y trabajadores de la Facultad de Artes. Por otro lado, es necesario que instalen la mesa de diálogo en la que ha insistido el movimiento con miras a conformar lo más pronto la Asamblea Universitaria, instancia que puede coadyuvar a realizar control de los compromisos establecidos tanto en lo interno como hacia afuera. En este sentido, también queremos resaltar que logros como la Acreditación Institucional y la Acreditación de Alta Calidad alcanzados por varios programas deben ser decididamente apoyados, lo cual requiere, como todos lo sabemos, avanzar en los respectivos planes de mejoramiento y cuidar por mantener los actuales indicadores que condujeron a tales reconocimientos. Por último, es importante que se avance en los compromisos relacionados con la dignificación docente, asunto que exige la gestión de los concursos de méritos para el nombramiento de docentes de planta, conforme a la ley y a las necesidades y compromisos emanados de los procesos de autoevaluación y acreditación universitaria.

Dado en Bogotá a los 24 días del mes de enero de 2019 y firmado en original por los miembros del Consejo Académico del Doctorado Interinstitucional en Educación – CADE DIE-UD en su sesión CADE 01 2019 del 23 de enero de 2019.

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